Antonio García, Primer Comandante del ELN
Ni con Gabriel Yépez Mejía (HH), ni con Comuneros del
Sur se presentaron diferencias políticas por el Proceso de
Paz, o que ellos quisieran más la paz que el resto del ELN,
más bien eran incrédulos.
E l fondo de la situación estalló, o inició a estallarse cuando
HH apareció en el radar de la contrainteligencia del ELN en
diciembre de 2022. Durante este tiempo estaba tratando de
realizar algunas operaciones para golpear Comandantes del
ELN, varios agentes infiltrados relacionados con él fueron capturados
y entregaron información de los planes de ellos y de HH orientados
por la inteligencia militar colombiana.
Cuando se sintió descubierto, «se puso a resguardo», quiere
decir se reportó a sus verdaderos mandos (inteligencia militar
colombiana), pues al no poder concretar los golpes militares por
haber sido descubierto, al igual que sus agentes, ya no podían seguir
manteniéndolos como «agentes infiltrados», por eso activan su «plan
B», como un supuesto Proceso de Paz desmovilizándose. Aunque el
plan original con el que ha soñado la inteligencia militar es «matar
a los principales mandos de los Frentes de Guerra y copar ese vacío
de mando con infiltrados» para desmovilizar completamente un
Frente de Guerra, eso era lo que HH quería hacer con el Frente de
Guerra Suroccidental. Es claro HH cuando dice que es «autónomo»,
que no lo orienta el Comando Central, pues desde hace rato recibe
orientaciones y misiones desde las Fuerzas Militares colombianas.
A parte de lo anterior, HH ya ha asesinado varios compañeros que,
estando en el territorio, no le acatan sus órdenes, igual ha amenazado
a otros tantos. Con palabras, respondiendo entrevistas edulcoradas,
no pueden taparse asesinatos.
El Gobierno conoce esta situación, pues entendemos que el
Presidente, por ser Comandante en Jefe de las Fuerzas Militares, debe
estar informado sobre las operaciones de inteligencia de «carácter
estratégico», según sus sueños.
Pasando a otro asunto, lo que dice León Valencia en Blu radio no es
objetivo, pues lo acontecido en el II Congreso del ELN, en diciembre
de 1989, aunque es cierto que quedaron en minoría, luego que
dicho evento concluye y donde se toman definiciones que debían
respetarse y acatarse, él y otros afines a él se pusieron a conspirar,
reuniones en secreto y a espaldas del Comando Central, con fines
políticos ajenos a lo definido. Cuando nos enteramos les dijimos que
dejaran de estar haciendo este tipo de reuniones, yo mismo se los
dije en persona, pero lo negaron dos veces. Informé formalmente al
Comando Central y éste convocó oficialmente a los «conspiradores».
Querían negociar, que el ELN hiciera cambios en su política y así
ellos seguían en el ELN, desconociendo lo definido en un Congreso.
La conclusión fue que les respetábamos sus posiciones, pero que sin
disciplina política no podían seguir en el ELN. Ahí nació la Corriente
de Renovación Socialista, que luego se desmovilizó en 1994. Jamás
fueron a Caracas en 1991 a tratar de participar en los diálogos con
el Gobierno, eso es falso. Al año siguiente los empezaron a matar y
desde el ELN denunciamos sus muertes.
En estos últimos años hemos avanzado en la unidad interna del
ELN, se han realizado varios eventos democráticos y la identidad
ideológica, política y militar es más sólida, existen mayores consensos
y un espíritu de unidad para responder a los retos del momento.
En este contexto se viene preparando el VI Congreso Nacional del
ELN, hay unidad en el pensamiento estratégico y táctico, como
también en la forma de apreciar el momento político nacional e
internacional.
ay un avance importante en las discusiones internas que nos han
permitido organizar nuestra normatividad jurídica interna, quizá sea
la más avanzada en la historia del ELN.
Con todos estos elementos que les adelanto, les puedo decir que
el VI Congreso será un éxito, pues la actual Dirección Nacional y el
Comando Central llegan con un gran reconocimiento, por tanto hay
y habrá unidad en el ELN para rato.