
Sergio Torres
18 años monopolizando la fabricación de pasaportes en
Colombia, los 2 últimos en medio de un escándalo que aún no
termina. Thomas Greg & Sons parece tener más tentáculos de
los que el propio gobierno imaginaba. Otro pulpo transnacional
corrupto enquistado en sectores con manejos fundamentales
dentro del Estado.
Hasta hace unos años pasaba inadvertido el nombre
de la empresa que fabricaba los pasaportes, por
lo cual facturaba miles de millones de pesos. Sin
embargo, con los conflictos generados durante este
gobierno, hoy se conoce el pasado y presente turbio de esta
empresa, propiedad de colombianos, los hermanos Bautista.
Quienes han logrado ligar millonarios contratos, gracias a
sus relaciones con representantes de la oligarquía nacional.
Como todo cuanto tiene que ver, o hace parte de estas mafias,
la corrupción y el fraude son una característica principal.
Dos de sus fundadores fueron condenados en Estados Unidos
en la década de los 80 bajo cargos de fraude y estafa. Después
de ello, gracias a los mencionados nexos con familias como
Pastrana, Sanin y Santos, se fueron ganando contratos con el
Estado, en sectores asociados a seguridad de identificación
y logística electoral, fundamentales para asegurar fraudes
y manipular información.
Antecedentes y conflicto
En el panorama colombiano, esta empresa ya había aparecido
en las sombras de posibles fraudes electorales. Thomas Greg
& Sons apareció involucrado en el enredo de las elecciones
parlamentarias en 2014. Ahí ya venía amasando contratos
a la sombra de la presidencia de Juan Manuel Santos.
Curiosamente, en ese año ganó la licitación para el manejo
de las tarjetas electorales.
La reciente confrontación con el actual gobierno, inició en
2023 cuando el entonces canciller Alvaro Leyva, decidió
suspender el proceso de licitación para la fabricación de
pasaportes, cuestionado por las demás empresas concursantes
que se habían retirado denunciando fraude. Cuando Leyva
declaró desierta la convocatoria para hacerse con un contrato
de 599.561 millones de pesos, inició la confrontación, en la
que Thomas Greg & Sons cuenta con el respaldo de sectores
de las mafias tradicionales.
A pesar de esta confrontación, esta empresa siguió
manteniendo el monopolio gracias a las declaraciones de
urgencia manifiesta y la prórroga de los contratos para la
fabricación de pasaportes.
Esta pelea contra el gobierno ya ha cobrado al menos 2
cancilleres, Leyva y Sarabia. Y está a punto de generar otro
sismo de mantenerse la orden del presidente de no renovar
más el contrato, justamente una de las razones por las que
la ex-canciller Sarabia renunció.
Otro gol de la mafia
Recientemente la Registraduría Nacional del Estado Civil
adjudicó a Thomas Greg & Sons toda la logística electoral para
las elecciones parlamentarias y presidenciales de 2026. Un
contrato por 2,1 billones de pesos.
Para esta jugada la firma apareció bajo la modalidad de
unión temporal, “de la cual además hacen parte 11 empresas
conformadas mayoritariamente por las que por años se han
ganado los contratos de la logística electoral, entre estas:
Thomas Greg & Sons Limited, Thomas Greg and Sons de
Colombia SA, Thomas Processing & Systems SAS, Thomas Greg
Express, Seguridad Móvil de Colombia SA, Manejo Técnico
de Información SA. Securid SAS. Compañía Transportadora
de Valores Prosegur de Colombia SA, entre otras”, según
denunció la Misión de Observación Electoral (MOE).
A pesar de los pronunciamientos, mensajes y discursos
del presidente, en los que pone en duda la credibilidad de
las próximas elecciones e incluso el uso indebido de datos
y manipulación de información electoral, poco ha podido
hacer.
Queda evidenciado el arraigo e incidencia del poder mafioso
del régimen. El entramado corrupto en todos los poderes del
Estado. Y con ello la ratificación de la necesidad de cambios
profundos. Estas maquinarias no se combaten y liquidan
con los ‘paños tibios’ de la presidencia, requieren de una
confrontación radical contra las fuerzas mafiosas que las
apadrinan.