Es necesario que usted y toda su familia y vecinos sepan cuáles son los enemigos de la soberanía alimentaria. Es decir los que no dejan que los colombianos no desarrollemos la soberanía alimentaria.
1. Las transnacionales que se apropian comercialmente de todo el proceso productivo, desde la venta de la semilla y los insumos hasta la compra de los productos agrícolas. Algo criminal es que solo 20 empresas transnacionales controlan toda la cadena de producción de alimentos. Imagínese usted: la humanidad dependiendo de 20 empresas transnacionales que ven en los alimentos no un derecho, sino la forma de enriquecerse más y más
Además hay transnacionales que tienen grandes producciones agrícolas para exportación como la antigua United Fruit Company que ordenó la masacre de las bananeras y hoy se llama Dole y sigue ordenando la muerte de colombianos utilizando al ejército y a los paramilitares.

Presten atención. Cuando uno escucha hablar de transnacional, muchas veces se asocia únicamente con las empresas que nos roban el carbón en complicidad con la oligarquía colombiana. Pero esas transnacionales también están metidas en el negocio de la producción agrícola, de la tierra y el agua.

Aquí le presentamos una información de algunas transnacionales y cómo actúan.
La multinacional japonesa Mitsui compró en Brasil 100 mil hectáreas de tierra; además están ofreciendo 100 millones de hectáreas para la siembra de caña de azúcar, soya, palma aceitera; pero no es para la alimentación de los seres humanos, sino para el combustible de los carros de Estados Unidos.
Las multinacionales francesas Suez y Vivendi, que dominan el negocio de agua privatizada en el mundo, tienen presencia en Colombia, principalmente en la Costa Atlántica y Boyacá. La multinacional china Suntime International Techno-Economic anda comprando tierra en todo el mundo para la siembra de granos.

Allá en el hermano pueblo chileno, la multinacional Benetton despojó a los indígenas mapuches de 900 mil hectáreas.

Hay que estar alerta de los acuerdos que hizo Santos con Japón y corea del sur, ese país gran comprador de tierra a través de Daewoo, una de las grandes compradoras de tierra en el mundo.

Las transnacionales son las que disminuyen los precios de los productos que produce con las uñas el campesino y son las mismas que le ponen el precio a los insumos y el precio a los que van a comprar los productos.
Otra cosa que usted debe saber es que el problema del hambre no es porque haya hambre por escases de alimento, sino porque las multinacionales acaparan toda la producción alimentaria y prefieren quemarla y destruirla, antes que distribuirla. Con lo que se produce de alimento en el mundo se satisface la necesidad de los algo más de 6 mil millones de habitantes que tiene el planeta y que da el 10%. Es decir quedarían todos los seres humanos sin hambre y el 10% de reserva.

2. El otro obstáculo que tiene la soberanía alimentaria son los gobiernos arrodillados a los imperialistas, como el gobierno de Juan Manuel Santos, que al igual que los anteriores no tiene políticas para el desarrollo y el bienestar de la nación, sino que está subordinado a las políticas de Estados unidos y al capital transnacional.
Estos gobiernos no llaman a los campesinos a decirle: vea aquí están estos recursos y estas garantías para que siembren maíz, ñame, aguacate, ahuyama, arracacha. Al contrario, lo que hace es despojarlo de sus tierras para que lleguen las multinacionales a saquear los recursos, tales como el petróleo, el oro.
El estado colombiano y sus diferentes gobiernos, incluyendo el actual de Juan Manuel Santos le no solo deja que las multinacionales despojen a los campesinos de las tierras, utilizando al ejército colombiano y a los paramilitares, sino que le da un manto de legalidad con sus leyes a favor de las multinacionales. Ahora las dueñas “legales” de las tierras son las multinacionales y no los campesinos.
En ese sentido, esas multinacionales no van a comprar tierra para sembrar ñame, maíz, arroz, aguacate, cebolla y demás productos agrícolas para venderlo a buen precio en los municipios de Colombia, para venderlos a buen precio en Teorama, La Jagua de Ibirico, Cúcuta, Valledupar. Las tierras son para negocios que perjudican a la nación.
Como podemos ver, esos dos obstáculos de la soberanía alimentaria, son los mismos obstáculos que tenemos para conseguir la paz. Son cucarachas del mismo calabazo.
En conclusión, los que no permiten que en Colombia haya soberanía alimentaria son las transnacionales y el gobierno colombiano.
Qué cree usted que debemos hacer como campesino, como indígena, como pueblo, como nación? Espere mañana unas ideas que desde estas humildes ondas hertzianas, las vamos a compartir con ustedes.