Himelda Ascanio

En estas últimas semanas se puso en debate las razones
y formas de la movilización social; en Colombia hay
muchos motivos para que el pueblo se movilice, el intento
de continuidad de la mafia en la dirección de la Fiscalía,
es uno de ellos.

Las grandes empresas de comunicación no han descansado
en su descarga diaria de falsedades y manipulación, desde
que varios sectores sociales manifestaron su decisión de
movilizarse en defensa del mandato por los cambios, en
contra del aplazamiento en la elección de Fiscal y en general, en
demostración de respuesta ante un posible golpe de Estado legal
(Lawfare); según estas vocerías del viejo régimen, el pueblo no tiene
derecho a reclamar y demostrar su inconformidad, cuando no solo
lo tiene, sino que debe ejercer su legitima expresión y por las vías
que considere necesario.

Secuestro de la verdad

Un aspecto que merecería una gran convocatoria es el de la
información y el manejo de los medios de comunicación; está
claro que las grandes cadenas de radio y televisión, al igual que
los periódicos nacionales y locales, son parte de los emporios
financieros y son estos quienes marcan sus líneas editoriales; pero la
comunicación y la información son derechos del pueblo. La veracidad
y el rigor no deberían perderse y en Colombia los grandes medios
lo perdieron hace rato; es descarada la manera en que mienten sin
ninguna vergüenza, califican, estigmatizan, aplican toda la cartilla
de la posverdad para inocular odio, temor y desconfianza, en fin,
para manipular y generar opinión por vía de la saturación.

Con las recientes movilizaciones en las que la gente salió a rechazar
el nombramiento amañado de una nueva Fiscal General, varios
manipuladores de la comunicación intentaron generar un ambiente
de conflicto, llamando prácticamente a una guerra civil y hablando
de supuestas retenciones a magistrados de la Corte, esta que
desconoce la expresión popular y se pasa por la faja la justicia
misma. Por fortuna, hoy la comunicación es multimedial y existen
muchas maneras de desmentir a estos mal llamados periodistas. La
propia producción multimedia y el acceso a redes y espacios virtuales
ayudan a que la verdad no sea totalmente acallada.

Cabe recordar que en estas apuestas de desestabilización y guerras
modernas, el papel de los medios de comunicación es central. Los
llamados golpes de Estado blandos inician justamente por la irrigación
constante de información tendenciosamente manipulada, para
generar reacciones en la audiencia. Aprovecharse de la baja cultura
política para incendiar las mentes con odios viscerales. Encumbrar
personajes, opinadores falaces para que poseen de portadores de
las soluciones; en Colombia ocurren ya todas estas condiciones.

El llamado que hizo Petro a la movilización dispara las alarmas en
todas las instancias del país, pues no es irreal que el viejo régimen
hará todo lo posible por retornar al Gobierno y echar a la basura los
anhelos de cambio, que el pueblo peleó en las calles y en las urnas.
Se equivoca la derecha mafiosa si cree que la demostración de
indignación y malestar vivida en el Estallido Social de 2021 fue solo
un caso aislado; se hecho, esa manifestación tuvo como continuidad
la elección del actual Gobierno, lo cual quiere decir que su contenido
político y visión de luchar por cambios, es continua. Ahora bien, la
defensa de este mandato por los cambios debe darse en la calle con
la gente y debe empezar a identificar plenamente las amenazas, que
operan continuamente en su contra. La manipulación mediática y la
mentira informativa también deben acabarse.

Asesinados de esta semana

Eywar Yamid Moran, lideraba la Guardia Indígena del Resguardo
de Pueblo Nuevo de Caldono, Cauca; fue asesinado el 10 de febrero
de 2024en Santander de Quilichao, Cauca.

Jaime Ernesto Páez Devia, era un reconocido líder cafetero y
comunitario de la vereda Buenavista en el municipio de Rioblanco al
sur del departamento del Tolima; fue asesinado el 11 de febrero en
Rioblanco, Tolima.

El 13 de febrero de 2024 en Anserma Nuevo, Valle del Cauca; en
el interior de un establecimiento público, perpetraron una masacre
que dejo tres víctimas fatales.